Para México la crisis generada por la pandemia tiene características en el mercado laboral diferentes a las de la crisis de 2008-2009. Hubo inicialmente un gran aumento en la tasa de inactividad y una caída en la tasa de informalidad. La posterior recuperación parcial en el empleo se debe en parte a variaciones en dos tipos de personas: desocupados temporales y empleados ausentes.
Se utiliza un modelo estructural de una economía pequeña, abierta y con sectores formal e informal para analizar los datos de la pandemia, calibrando el modelo para México.
Se analizan varias medidas de política económica que pueden implementarse para acelerar la recuperación del empleo. Una reducción en la carga tributaria de empresas formales o un subsidio a la contratación formal tienen efectos similares sobre empleo, PIB y productividad, aunque el subsidio tiene un menor costo fiscal. Otro resultado tiene que ver con la productividad agregada: dependiendo de la política implementada se asignará mas o menos trabajo a los sectores formal e informal. Mayor asignación del trabajo al sector formal incrementa la productividad.